Este 14 se septiembre se celebra en la Argentina el Día del Cartero, el cual recuerda el día en que Bruno Ramírez, el primer cartero oficial designado en Buenos Aires, tomó posesión de su cargo en 1771. Desde ese momento, aparece en las calles porteñas en principio, y luego en todo el país, una figura que con el paso del tiempo se convirtió en un personaje característico del paisaje urbano.
El sevillano Ramírez comenzaba así a ejercer un oficio que no existía en la Gobernación del Río de la Plata -el Virreinato vendría en 1776-, el cual consistía en la entrega de misivas o cartas en los domicilios de la ciudad de Buenos Aires.
Cabe destacar que la distribución de cartas en las colonias españolas había comenzado más de dos siglos atrás. En 1514, se estableció el primer Correo Mayor con las Indias -con sede en Lima-, cuyo sistema de comunicación consistía en una serie de postas a caballos, que unían varios puntos de lo que hoy son Argentina, Uruguay, Chile, Paraguay y Perú.
En Buenos Aires, el sistema postal era dirigido por Domingo Basavilbaso, quien lo modificó en 1771. Esto fue porque las cartas no llegaban directamente al domicilio, sino que cada persona debía ir a retirarlas a lugares determinados y las tardanzas de los envíos eran considerables, de ahí la necesidad de “optimizar el sistema”. Fue así que se incluyó el rol del cartero, el cual perdura hasta nuestros días pese a la modernidad de las comunicaciones.
