El tercer día de junio también se celebra en nuestro país el día que hace referencia a una de las más pronunciadas y grandes olas de migración que recibió la argentina. Se trata del día del inmigrante italiano.
Esta fecha se estableció a través de la Ley N° 24561, en reconocimiento a aquellos que con valor, trabajo y sacrificio, trabajaron por la grandeza de la Argentina.
Se eligió esta fecha por ser el día del nacimiento de Manuel Belgrano, como un homenaje a los italianos que han enriquecido el patrimonio espiritual y material de la Patria Argentina.
La inmigración italiana fue el movimiento inmigratorio más caudaloso e importante que recibió la Argentina.
Se estima que entre 1870 y 1920 llegaron más de 3 millones de italianos a nuestro país. La guerra, los conflictos sociopolíticos y la hambruna son algunos de los motivos.
La difícil situación llevó a millones de italianos a huir de sus hogares y dejar atrás su patria. En paralelo, nuestro país vivía un período de gran esplendor. Así fue como la Argentina abrazó y acogió a aquellos que decidieron abandonar su hogar en busca de una vida mejor.
Entre aquellas familias de inmigrantes, la historia destaca a la conformada por Don Domingo Belgrano Pérez, un genovés llegado a Buenos Aires previo paso por España y Doña María Josefa González, hogar en el cual nació el 3 de junio de 1770 Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, creador de la Bandera Nacional.
En Oneglia, Liguria, nació el padre de uno de los personajes más respetados de la historia argentina. Fue Belgrano quien supo darle los colores celeste y blanco a nuestra insignia máxima. Uno de los padres fundadores de la patria es hijo de italianos.
Giuseppe Manzo, embajador de Italia, considera a Manuel Belgrano “un hombre polifacético, brillante y visionario que llevó consigo la herencia, el espíritu y los valores itálicos. Es un emblema de la inmigración italiana”.
