Pasados casi dos años desde el crimen en el que un grupo de rugbiers asesinó a golpes a Fernando Báez Sosa, el próximo 2 de enero tendrá lugar el inicio del juicio.
El hecho ocurrió el 18 de enero del 2020 en Villa Gessel y por este, un grupo de rugbiers se encuentra imputado por “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”.
El debate oral tendrá inicio el segundo día de enero y se prevé que finalice el 31 de enero, aunque existe la posibilidad de que supere ese límite por la gran cantidad de testigos citados en la causa, que alcanzan las 130 personas.
Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli, Luciano, Lucas y Ciro Pertossi están pasando sus días detenidos en la Alcaidía Departamental La Plata 3 esperando conocer el veredicto final de los jueces María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores a fines del primer mes del año próximo.
En la primera audiencia se espera que los rugbiers estén presentes en los tribunales o en sus adyacencias, que sería en la Unidad N°6 de Dolores, ya que quieren “mantener un perfil bajo”.
Se presume que en las siguientes jornadas estarán vía Zoom.
El juicio se realizará en la ciudad de Dolores y entre los testigos participarán amigos, familiares de la víctima y personas que se encontraban en ese entonces cerca del lugar donde ocurrió el asesinato.
La modalidad de la primer sesión está organizada para que comience con unas palabras de Silvino Báez y Graciela Sosa, los padres de la víctima, por fuera de la declaración.
La instancia comenzó y se desarrollará en plena feria judicial, dado que el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1, conformado por María Clauda Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari, manifestó tener su agenda cargada.
Los familiares piden la pena máxima de prisión perpetua para los ocho acusados que actualmente se encuentran detenidos .
