El abogado de Fabiola Yañez, Juan Pablo Fioribello, habló del presunto maltrato de Alberto Fernández. “La discusión existió, pero no hubo violencia”, dijo al aire de TN de Noche. Al mismo tiempo, aseguró que no hay ninguna denuncia por parte de la exprimera dama: “Le ofrecieron si ella quería hacer algún tipo de denuncia y ella dijo que no”.
“Los chats existieron, pero no los vi y las fotos tampoco”, indicó el letrado sobre la información que fue publicada este domingo por Clarín. En una charla con el periodista Franco Mercuriali, detalló que los hechos habrían ocurrido entre 2021 y 2022.
La Justicia obtuvo los datos de los aparentes maltratos a partir de la causa por el escándalo de los seguros durante el gobierno anterior. Allí habrían encontrado fotos de Yañez con signos de golpes y chats en los que aparentemente habría acusado al exmandatario por supuestas agresiones.
El material fue hallado en el teléfono de la exsecretaria privada de Fernández, María Cantero, en un equipo secuestrado y peritado en el expediente en el que está imputado el exmandatario.
Sobre los motivos de Yañez para enviarle los mensajes a Cantero, Fioribello afirmó que fue porque hubo una pelea entre el matrimonio: “Fue como una forma de desahogo, habrá querido hablar con la secretaria privada para contarle lo que discutieron”.
“Lo llamé a Alberto y me contó exactamente lo mismo que ella, que habían tenido una discusión y que no sabía de la existencia de los chats. Se mostró terriblemente compungido por el tema y negó de forma categórica haber tenido algún tipo de agresión física”, explicó Fioribello.
La sospecha sobre Fernández es que, con la firma de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), benefició a brokers de seguros que mediaron con Nación Seguros y la contratación de pólizas desde varios organismos, concretamente la ANSES y el Ministerio de Seguridad. Entre ellos Héctor Martínez Sosa, esposo de Cantero.
QUÉ ENCONTRARON EN EL CELULAR DE MARÍA CANTERO
Entre el material que se detectó en el celular de Cantero, aparecen fotos de Yáñez con signos visibles de golpes, un ojo morado, el maxilar muy hinchado y moretones en el torso. Se encontraron audios y chats donde la ex primera dama describe golpizas sufridas en la Quinta de Olivos, aun cuando estaba embarazada del hijo que tiene con Alberto.