Desde el 7 de diciembre en gran parte de Perú se vive una ola de protestas, cuando Boluarte asumió el poder luego de que el Congreso destituyera al presidente Pedro Castillo, horas después de que éste anunciara la disolución del parlamento y el establecimiento de un gobierno excepcional con supresión de garantías.
Esas protestas tuvieron una pausa por las fiestas de fin de año y se reanudaron el miércoles pasado.
Este lunes, los enfrentamientos entre las fuerzas del orden y manifestantes contra el gobierno de la presidenta Dina Boluarte dejaron 17 muertos en Juliaca, en el sur de Perú, cuando unas dos mil personas intentaron tomar por asalto el aeropuerto de la ciudad de Juliaca, informó la Defensoría del Pueblo, una cifra que sumó cinco decesos a la brindada anteriormente en forma oficial.
En las últimas horas se contabilizaron cinco muertos con heridas graves, tenían en el cuerpo impactos de proyectil, según detalló un responsable sanitario del hospital Carlos Monge, a donde fueron trasladadas. Tomando en cuenta estas 17 personas se llega a un total de 40 muertes.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) informó en un comunicado que visitará Perú entre el miércoles y el viernes «para observar la situación de derechos humanos», en un momento de profunda crisis institucional y política en el país.
La Comisión «valora la apertura del Estado de Perú para cooperar y dialogar en el marco de sus obligaciones de derechos humanos» y agradece «su disposición para recibirla», indicó la CIDH.
