Arne Espeel, arquero del Winkel Sport B, de la Segunda División Regional de la provincia de West Flanders de Bélgica, murió de muerte súbita en pleno campo de juego tras atajar un penal en el partido ante Westrozebeke.
Espeel, de 25 años, saltó lleno de alegría tras atajar un penal, pero se desplomó inmediatamente segundos después. El servicio médico presente acudió rápidamente al lugar e intentaron reanimar al joven. Lamentablemente, la ayuda fue en vano y el portero fue declarado muerto más tarde en el hospital.
«Ha sido un golpe inusualmente duro. Creo que algunos jugadores todavía no se dan cuenta de lo que ha sucedido exactamente», declaró el asistente de Winkel Sport B, Stefaan Dewerchin.
Todos los miembros del club, familiares, amigos y aficionados realizarán una caminata por las calles de Sint-Eloois-Winkel como homenaje al arquero.