Cada 15 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Democracia, fecha declarada en 2007 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como jornada conmemorativa de las libertades fundamentales en todo el mundo.
La fecha de su celebración rememora aquel 15 de septiembre de 1997 en que la Unión Interparlamentaria adoptó la Declaración Universal de Democracia después de las sucesivas Conferencias Internacionales sobre Democracias Nuevas y Restauradas que comenzaron en 1988 por iniciativa de la Presidenta Corazón Aquino.
El término democracia tiene su origen en el idioma griego y consiste en la combinación de los vocablos demo, que significa ‘pueblo’, y kratia (cracia), que significa ‘poder’, ‘gobierno’, u ‘organización’. De manera que podemos entender este vocablo como una referencia al poder, gobierno, u organización del pueblo.
La democracia es un valor universal pero al mismo tiempo no existe un modelo único de democracia, sino un sin número de interpretaciones que comparten principios y valores comunes.
Este sistema político tiene más de una forma, sin embargo, en cualquiera de éstas lo que se prioriza es la participación ciudadana en el poder del gobierno. En el caso de Argentina, nuestra democracia es de tipo representativa.
Sin embargo, esta amplitud conceptual es la que hace necesario fomentar prácticas que consoliden la cultura democrática y conciencien a los ciudadanos respecto de sus deberes y derechos.
Este concepto refiere en otras palabras, aquella organización política basada en la participación de los ciudadanos en todo lo concerniente a la elección de presidentes, la decisión de asuntos públicos, etc.
Cada año, el Día Internacional de la Democracia trabaja en torno a un lema, y este año 2022 es: «Proteger la Libertad de Prensa para la Democracia».
Se quiere proteger a los medios de comunicación y que sean libres, independientes y plurales para que puedan informar a las personas sobre cuestiones de interés público.