En la tarde de ayer, la selección Argentina logró la clasificación a los octavos de final de la Copa del Mundo con el sólido triunfo sobre Polonia 2-0.
El partido, que tuvo una gran superioridad argentina, terminó con uno de los clásicos jugadores de la selección fue reemplazado tras una dolencia.
Ángel Di María en el medio del partido sufrió una molestia muscular la cual lo obligó a ser sustituido a los 60 minutos y crece la preocupación en el equipo.
Fideo presentó un dolor en el cuádriceps cuando faltaba media hora para el final y fue reemplazado por Leandro Paredes.
Al llegar a los bancos de suplentes, los médicos se acercaron para atenderlo y ponerle hielo en la zona afectada, despertando la preocupación de los argentinos de cara a la próxima fase.
Por su parte, el dt del seleccionado, Lionel Scaloni dio una conferencia de prensa donde trató de enviar tranquilidad al pueblo argentino con respecto a la situación de “Fideo”.
«Está bien, en principio. Sintió algo en el cuadriceps, se puso duro y preferimos sacarlo. Ya todos saben que es importante, no vale la pena seguir con un jugador que tiene posibilidades de hacerse daño», expresó Scaloni.
En esta conferencia el entrenador también hizo un reclamo a la FIFA con respecto al encuentro que se disputará el sábado ante Australia.
«Estamos contentos, pero no tan efusivos. Porque es una locura total jugar dentro de casi dos días, cuando somos primeros de grupo. No lo puedo entender. Es la 1 de la mañana, mañana ya es jueves y al otro día debemos preparar el partido y jugar», advirtió el técnico argentino en conferencia de prensa.
«No están dadas las condiciones para que así sea. Es para los dos iguales, pero podríamos haber tenido más descando por ser primeros de grupo la verdad», aseguró.