La plataforma de streaming Netflix sigue ofreciendo contenido original como parte de su catálogo, y en este caso, la semana pasada lanzó una nueva serie adolescente LGBT, que causó sensación en las redes sociales y fue lo más visto en argentina en su primera semana.
Esta historia está basada en una novela gráfica que lleva el mismo nombre, propiedad de la escritoria Alice Oseman y que salió hace algunos años.
Esta nueva serie británica es una adaptación que según las críticas en redes sociales no hacen mucha justicia a lo que se llega a percibir con el libro, tal como sucedió anteriormente con la adaptación de “Las ventajas de ser invisible”, e incluso con “Bajo la misma estrella” años atrás.
Heartstopper es una comedia romántica adolescente que tiene como protagonistas a dos jóvenes que, en medio de una amistad y un amor con tintes platónicos, descubren que están enamorados uno del otro.
Una historia normal y vista millones de veces desde la perspectiva heterosexual, pero que causó un revuelo en las redes sociales por la carga simbólica que trae para el colectivo el poder disfrutar de un “amor de cuentos” de la manera en la que les gustaría haberla vivido.
En los cientos de comentarios en redes sociales y artículos sobre la historia, personas que forman parte del colectivo LGBTQ+ expresan que las incorporaciones de audiovisuales de este calibre alientan beneficiosamente a muchos jóvenes que están pasando por una gran confusión consigo mismos y necesitan de un empujón para darse cuenta que lo que les sucede no es algo malo.
Además, una gran cantidad de personas habló de una “adolescencia que les fue quitada”, por los perjuicios de los tiempos pasados y la escaza libertad con la que podían vivir, obligándose a reprimir emociones, sentimiento e incluso sus formas de expresarse como eran.
Más allá de cumplir con un noble y sensible entretenimiento, Heartstopper ilumina el momento de la salida del clóset, desde una premisa que no pasa por el imperativo del anuncio a la fuerza, sino en la dignidad de poder mirar a familia y amigos, sin la pesada mochila de aquello que se sabe y se calla entre las sombras.
