El equipo brasilero Fortaleza perdió un partido ante Avai, y quedó ubicado en el último lugar del Torneo Brasileirao.
Los hinchas del equipo del Nordeste del país se tomaron muy mal el resultado, fueron a esperar al plantel al aeropuerto Pinto Martins para reprocharles y hubieron incidentes con un jugador.
Cuando el plantel de Fortaleza regresó después de disputar el partido correspondiente a la fecha 12 del torneo local, Robson, delantero y quien realizó uno los goles en la derrota por 3-2, fue rodeado por un grupo de personas enfurecidas.
A la salida del aeropuerto Pinto Martins ante unas 60 personas protestando contra la mala campaña del equipo, Robson se detuvo para hablar con parte de la multitud y fue golpeado por un casco.
Con cánticos de protesta contra el equipo, la afición siguió la embestida a los deportistas fuera del aeropuerto, momento en el que Robson fue atacado.
Fortaleza es colista del Campeonato Brasileño con solo siete puntos en 12 partidos disputados hasta el momento y se encuentra en zona de descenso. A su vez, el equipo avanzó a los octavos de final de la Copa Libertadores, donde enfrentará a Estudiantes de la Plata.
“Fortaleza Esporte Clube repudia con vehemencia las agresiones sufridas por el delantero Robson y otros jugadores registradas en la tarde de este viernes. El caso ocurrió después de que la delegación llegara al Aeropuerto Internacional de Fortaleza tras regresar a la capital de Ceará después del partido contra Avaí, en Florianópolis. El Club está dando todo su apoyo al deportista y analizando el hecho para comprobar la necesidad de una posible adopción de medidas legales. Entendemos el momento difícil, las exigencias y la necesidad de mejorar, siempre y cuando las protestas no impliquen violencia”, señalaron desde la institución a través de un comunicado.
Robson, de 31 años, es uno de los jugadores más experimentados del plantel, aunque solo ha estado una temporada en el equipo. El hombre que ha marcado 13 goles con la camiseta de Fortaleza creyó que sus palabras serían suficientes para descomprimir la tensión, pero se encontró con una situación de violencia inaudita que ha escandalizado a Brasil.