El Gobierno se expresó este martes por la tarde sobre el fallecimiento del argentino Lior Rudaeff, uno de los rehenes secuestrados por Hamás durante el ataque registrado en territorio israelí el 7 de octubre pasado, y volvió a reclamar la liberación de los cautivos.
«La Cancillería argentina lamenta profundamente el fallecimiento del ciudadano argentino Lior Rudaeff a manos de Hamás, ocurrido el 7 de octubre pasado y confirmado hoy por autoridades israelíes», indicó el comunicado difundido este martes por la tarde.
A través del mismo, «extiende sus más sentidas condolencias a sus familiares y amigos», al tiempo que «reitera su enfática y firme condena al accionar terrorista de Hamás, del que han sido víctimas el señor Rudaeff y otros compatriotas».
En ese sentido, el Gobierno volvió a reclamar la liberación «con extrema urgencia y sin condiciones» de los argentinos que aún siguen rehenes del grupo terrorista palestino.
«La Argentina está empeñada en un esfuerzo que acompañan otros países con nacionales en la misma situación, para lograr que todos los rehenes sean prontamente devueltos a sus hogares y familias», concluyó el comunicado.
Lior Rudaeff nació en Argentina, pero desde los 7 años vivía en Israel, donde se mudó con su familia instalándose en la kibutz Nir Yitzchak. Trabajaba como conductor de una ambulancia de su comunidad. También estaba a cargo de la seguridad del kibutz donde vivía. Estaba casado y era padre de 4 hijos.