La jueza de la Sala II del Tribunal de Juicio de Tartagal, Sandra Mabel Sánchez, condenó a Ezequiel Tomás Aguilar, alias “Payo”, a la pena de diez años de prisión de ejecución efectiva por ser el coautor del delito de homicidio simple.
El fiscal penal Pablo Cabot, interino en la Fiscalía Penal de la Unidad de Graves Atentados de Tartagal, representó al Ministerio Público Fiscal en el juicio contra el joven como autor del delito de homicidio agravado por alevosía en perjuicio de Enrique Rodríguez.
El hecho juzgado ocurrió el 31 de julio de 2021 en barrio Nueva Esperanza de la ciudad de Tartagal, cuando tras una disputa, dos hermanos, un mayor y un menor, atacaron a Rodríguez en una pelea por cuestiones de plata y tras asestarle una puñalada en el tórax, causaron su muerte.
Durante los alegatos, el fiscal Cabot sostuvo la acusación y solicitó que sea condenado a la pena de prisión perpetua, mientras que la defensa de Aguilar solicitó que sea absuelto por el beneficio de la duda.
Por su parte, la jueza Sánchez condenó a Aguilar a la pena de 10 años de prisión efectiva como autor del delito de homicidio simple y en el mismo fallo, dispuso la extracción de material genético del condenado por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato Único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.
El joven de 19 años continuará detenido en la Alcaidía de esa ciudad. Además se ordenó realizar un examen psicofísico para su identificación integral y posterior inclusión en el banco de datos genético.
El hermano de Aguilar, que tenía 15 años al momento del hecho, fue sobreseído por inimputabilidad. Como se recordará, el artículo 1 de la ley 22278 establece que el menor que no haya cumplido los 16 años no es punible. Por otro lado, el artículo 428 inciso “e” del Código Procesal Penal establece que el sobreseimiento procederá, entre otras cosas, cuando mediare una causa de inimputabilidad.
