Un hombre de 34 años fue condenado a once años de prisión efectiva por ser autor del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia preexistente y la minoría de edad de la víctima (un hecho), y abuso sexual simple agravado por la convivencia preexistente y la minoría de edad de la víctima (dos hechos) en concurso real.
En el fallo se ordenó su traslado hacia la Alcaidía de Tartagal y la extracción de muestras genéticas para la inscripción en el registro de condenados por delitos contra la integridad sexual.
El hecho sucedió en Embarcación, durante octubre de 2022. El hombre vivía con su hermano y sus dos sobrinas de 13 y 9 años. La denuncia la radicó la madre de las niñas cuando llevó a la más grande al hospital por dolores abdominales. En esa ocasión los médicos le informaron que cursaba un embarazo. Fue entonces que la niña le contó a su mamá lo sucedido y agregó que su hermana también había sufrido abusos por parte de su tío.
